A finales del siglo XIX, el arquitecto modernista Lluís Domenech i Montaner (Barcelona, 1850-1923) proyectó el complejo que albergaría la institución Hospital de la Santa Creu i Sant Pau, fundada en 1401 al integrarse varios hospitales de Barcelona.
Ocupa 9 hectáreas y consta de 60.000 m2 construidos, repartidos en 17 pabellones ubicados en el centro de Barcelona. El conjunto arquitectónico, uno de los principales representantes del modernismo catalán, fue concebido como una ciudad con calles, jardines, edificios y un kilómetro de túneles que conectan todos los pabellones con una red de galerías subterráneas.
Con el traslado de la actividad sanitaria a otra sede a finales de los años 2000, se abrió una nueva etapa para este complejo que, tras someterse a una profunda rehabilitación impulsada por el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (Mitma), ahora se destina a usos culturales y sociales.
Desde el inicio de las actuaciones en julio 2009, con la reconstrucción de la cúpula del Pabellón de Nuestra Señora de la Merced, que se desmoronó en 2004, se han destinado 10,5 millones de euros en la ambiciosa rehabilitación del conjunto arquitectónico, de los que Mitma ha aportado 7,5 millones de euros con cargo al Programa 2% Cultural.
Los trabajos de regeneración se han ejecutado a través de nueve actuaciones y, actualmente, está en ejecución la última de ellas, la novena, destinada a la rehabilitación y consolidación de la cubierta, cúpula, terrazas, torre del agua y fachadas del pabellón de Nuestra Señora de la Purísima. Para esta última actuación, Mitma ha concedido una ayuda de unos 1,3 millones de euros, más del 56% del presupuesto total.
El complejo, construido en dos fases entre 1902 y 1930, y fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1997. También es Bien de Interés Cultural y está incluido en el vigente Catálogo del Patrimonio Histórico-Artístico de la ciudad de Barcelona.
A través de los nueve proyectos cofinanciados por el Ministerio, se han restaurado los pabellones del histórico recinto del hospital… El objetivo ha sido restituir al máximo los edificios a su estado original, recuperando el interés histórico-artístico del monumento, con la rehabilitación de las cubiertas, fachadas, carpinterías e interiores, respetando la composición original de los materiales, formas y colores. En este sentido, en algunas actuaciones se ha apostado por reparar los materiales que integran las construcciones y las distintas ornamentaciones en piedra, cerámica decorativa y ladrillo, y se han restaurado elementos decorativos empleando materiales y técnicas originales.
Y es que alguno de los pabellones, como el de San Leopoldo, sufrieron reformas que implicaron la transformación radical, tanto del exterior como del interior del edificio, que han llevado al derribo de cuerpos añadidos para recuperar el aspecto original.
Descripción de la imagen"Imagen general de la obra".
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Descripción de la imagen"Imagen general de la obra con la sagrada familia de fondo".
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Descripción de la imagen"Detalle de la fachada".
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Descripción de la imagen"Segundo detalle de la fachada".
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Descripción de la imagen"Detalle de alas internas del Hospital".
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Descripción de la imagen"Detalle interno del hospital. Entrada interior".
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Descripción de la imagen"Detalle lateral interno del hospital. Entrada interior".
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Descripción de la imagen"Detalle cubierta".
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